
Demian Bichir y Woody Harrelson no alcanzaron las expectativas que había sobre ellos. Harrelson se reunía en "Rampart" con el director que le había traído hace un par de años de nuevo a la carrera por los premios, pero su interpretación de policía corrupto sólo ha sido premiada por los críticos afroamericanos. Mejor lo tenía Bichir, quién parecía tener las puertas abiertas cuando recibió esa sorprendente nominación al SAG por su trabajo en "A better life". Consiguió esa codiciada nominación de los actores, pero ninguna asociación de críticos le apoyó. Todo apunta a que la de Bichir será este año una de las pocas nominaciones de los SAG que posteriormente no coinciden con los premios de la Academia.
Más apoyo ha tenido Michael Shannon gracias a los reconocimientos de varias asociaciones de críticos estadounidenses a su trabajo en "Take Shelter". Sin embargo, cuando han llegado los premios de la industria y las organizaciones más importantes (Critics Choice, Globos de Oro) su nombre ha salido de la conversación. Su impactante interpretación aún podría colarse en categoría de 5º nominado, pero le falta el factor nombre que sí tenían candidatos "sorpresa" como Tommy Lee Jones en 2007 o Javier Bardem en 2010. Le falta empaque, pero podría aparecer en el grupo: en 2008 Shannon consiguió optar como secundario a pesar de la marginación general a "Revolutionary Road".
Quien sí puede presumir de estrellato y prestigio a pesar de tener sólo 31 años es Ryan Gosling. Desgraciadamente para él, todo apunta a que la doble nominación en los Globos de Oro será el único reconocimiento grande que reciba este año. El canadiense es la estrella absoluta de hasta tres películas este año, pero ninguna de sus interpretaciones sobresale particularmente. Solo "Drive" ha llamado la atención de un par de asociaciones y ha sido básicamente por la pasión que sienten los críticos por la obra de Nicolas Windign Refn. Recordemos que en 2008 perdió la nominación a última hora por su sensacional trabajo en "Lars and the Real Girl" en favor de Johnny Depp. Y ese año se acordaron de él los Globos de Oro, el Sindicato de Actores y los Critics Choice. Después de todo, Gosling sigue siendo muy joven para los gustos de la Academia. Tocará esperar otro año a verle en la terna de nominados... pero volverá. De eso no hay duda.
Al empezar la temporada todo el mundo daba por hecho que Gary Oldman conseguiría por fin su primera nominación al Oscar gracias a el Smiley de "Tinker Tailor Soldier Spy". Cuatro meses después hemos visto como sólo se acordaban de Oldman los críticos de San Francisco y los BAFTA, la única organización importante en apoyar en masa a la adaptación de la obra de John LeCarré. Oldman tiene a su favor el factor "deuda histórica", unas notables críticas y un aire que recuerda al ya citado Tommy Lee Jones de "In the Valley of Elah". El apoyo de los BAFTA (que comparten cuerpo votante con la Academia de Hollywood) podría ser definitivo, pero tiene un problema por delante: no es el único británico en la carrera.
De Inglaterra pasamos a Irlanda. Michael Fassbender tiene una carta de presentación similar a la de Gosling: un año ejemplar en el que habido hueco para el cine de pedigree ("A dangerous method"), un éxito comercial ("X Men First Class") y una futura película de culto ("Shame"). El sensacional trabajo del actor en esta última ha servido a Fassbender para tener a la crítica rendida a sus pies, incluso a aquellos que no han terminado de entrar en la polémica pero fascinante "Shame". La Copa Volpi de Venecia y hasta 8 premios de la crítica (entre ellos la de Los Angeles) confirman que estamos ante un trabajo respetado. Solo Clooney ha ganado este año más premios que él. En contra un par de detalles significativos: el actor no obtuvo el apoyo del SAG... y se rumorea que "Shame" no ha gustado nada a la Academia. Es un trabajo sensacional e icónico, pero Fassbender (como Gosling, de nuevo) tendrá más oportunidades en el futuro.
Peor le debería sentar la ausencia a Leonardo DiCaprio. Hace 100 días era el favorito indiscutible para la victoria. El próximo martes debería estar satisfecho con estar en el quinteto final. Se ha creado un mito de fiasco entorno a "J. Edgar" (muchos dices que inmerecido), pero ese "hype" negativo del film no ha impedido la presencia de DiCaprio en los Critics, Globos de Oro y SAG. Sólo el BAFTA le ha dejado fuera. El historial de la Academia se presenta contradictorio para el protagonista de "Titanic". Por un lado, Eastwood ha dirigido hasta a 5 interpretaciones ganadoras del Oscar... por otro, esas películas por las que recibieron las estatuillas optaron a todo en los Oscar ("Million Dollar Baby", "Mystic River", "Sin Perdón"). Y los Académicos ya se olvidaron del actor en trabajos como "Atrápame si puedes" o "Revolutionary Road". Veremos.
A la tercera puede ser la definitiva para Brad Pitt. "12 Monos" le puso en el mapa en el 1995, pero tuvieron que pasar trece años para que volvieran a acordarse de él gracias a "The Curious Case of Benjamin Button". El año anterior habían desaprovechado la oportunidad de nominarle por su muy estimable intervención como padre superado por las circunstancias en la multinominada "Babel". Una vez ha consolidado su estatus en Hollywood como actor camaleónico que pasa de hacer rarezas a cine comercial sin pestañear un segundo, Pitt está en su mejor momento. 2011 ha sido un gran año para el intérprete. "The Tree of Life" le dio la oportunidad de mostrar un lado más seco y aún así impactante, pero es "Moneyball" la que le ha dejado más cerca que nunca de la gloria. Todas las organizaciones se han acordado de él y hasta 6 asociaciones de críticos que le han nombrado como el actor del año. La estatuilla puede ser la recompensa a una de las películas que mayor unanimidad y respeto han despertado a la temporada. Su director, Bennet Miller, ya llevó a Phillip Seymour Hoffman al Oscar hace 6 años. Pitt es el "dark horse" del que nadie debe olvidarse.
Si nos guíamos por la crítica, George Clooney es el hombre a batir. Hasta 13 premios ha recibido ya por su papel de cincuentón en crisis en la dramedia "The Descendants". Los influyentes Critics Choice y Globos de Oro a mejor actor dramático, entre ellos. Clooney escribe, produce, dirige e interpreta con solvencia y ha demostrado durante la pasada década que es mucho más que una cara bonita. Puede ser cierto que no es el intérprete más versatil del mundo, pero sí uno de los más efectivos. En realidad el encantador Clooney sólo tiene un par de detalles en su contra. Los académicos son reaciones a premiar a sus actores en más de una ocasión: sólo 14 actores en más de 80 años de historia han repetido Oscar. Y no nos olvidemos de que el Oscar de "Syriana" está muy fresco (2006), aunque eso no impidió el doble triunfo de gente como Sean Penn (2004, 2009) o Tom Hanks (1993, 1994).
Hasta ahora hemos hablado de estrellas que han dominado el panorama hollywoodiense durante los últimos 15 años (Clooney, DiCaprio, Pitt) ... y que pueden seguir haciéndolo durante los próximos 15 (DiCaprio, Gosling, Fassbender). Pero vivimos en el día de hoy... y hoy el mayor rival se llama Jean Dujardin. Es el protagonista de la película del año, sabe dar discursos (ya lo vimos en los Globos), está apoyado por el todopoderoso Harvey Weinsten y no nos olvidamos de un pequeño detalle: hace un trabajo sensacional, único. Posiblemente gane el BAFTA y pierda el SAG (en sus 16 años de historia sólo han premiado una interpretación no hablada en inglés: Roberto Benigni), pero eso no importa. Dujardin es el hombre de moda, el nombre más exótico y "novato" en un grupo de veteranos intérpretes. ¿Recordáis lo que pasó en 1998? Benigni ganó a Nick Nolte, Edward Norton, Tom Hanks y el favorito Ian McKellen. ¿Y en 2002? Adrian Brody venció en la brutal terna completada por Michael Caine, Daniel Day-Lewis, Nicolas Cage y Jack Nicholson. La historia, tarde o temprano, se repite.
Mi quinteto final sería Dujardin, Clooney, Pitt, Fassbender y DiCaprio, con Gary Oldman como alternativa. ¿Puede colarse un "intruso"? ¿Cuáles son vuestros candidatos? ¿Y el ganador?