martes, 8 de noviembre de 2011

Actores para el Oscar (XIV): Ryan Gosling


Considerado uno de los mejores actores de su generación, Ryan Gosling se ha ganado por méritos propios el lugar que ocupa en Hollywood. A punto de cumplir los 31 años y con una única nominación al Oscar en su haber que sabe a poco (lo merecía por “Blue Valentine” y “Lars and the Real Girl”), el canadiense es uno de los nombres de la temporada gracias a “Drive” y, sobre todo, “The Ides of March”, dos films radicalmente opuestos con los que espera engrosar su palmarés, ¿una segunda nominación a la estatuilla este año? Ufff.
Recordamos su filmografía a partir del post que le dedicamos el año pasado cuando peleaba por “Blue Valentine”.
Actor y cantante, Ryan Thomas Gosling, nació en Londres, Ontario, el 12 de noviembre de 1980, siendo el segundo hijo habido en el matrimonio mormón de Thomas, trabajador en una fábrica de papel, y Donna, secretaría. Su hermana mayor, Mandi, había nacido en 1976. Siendo muy pequeño, sus padres se divorciaron, trasladándose Ryan con su hermana y su madre a la ciudad de Cornwall, en la misma provincia, donde tuvo una educación peculiar, ya que a partir de los 10 años comenzó a recibir las clases en su propia casa, de manos de su propia madre, debido a sus continuos enfrentamientos en la escuela. Ya en la adolescencia, regresó al sistema público de enseñanza, donde manifestó un especial interés por las Bellas Artes y el teatro, aunque no terminaría la secundaria, abandonando los estudios a los 17 años, al poco de instalarse la familia en Burlington, también en Ontario.
Su primera aparición pública tuvo lugar a los 13 años, tras superar un casting donde se presentaron más de 17.000 aspirantes, para participar en el programa de “Mickey Mouse Club”, la cantera de futuras estrellas como Britney Spears, Justin Timberlake, Christina Aguilera o Keri Russell. Durante tres años consecutivos, participó una vez al año en dicho show, donde demostró sus cualidades para el canto y el baile. Curiosamente, durante sus estancias en Lake Buena Vista, Florida, donde se rodaba el show, Gosling se alojaba en casa de la familia de Timberlake.
En 1996 debutó en el cine, de manera mediocre, con “Frankenstein & Me”, de Robert Tinnell, tras la cual sumó numerosas participaciones esporádicas en series de televisión, consiguiendo un papel protagonista en “Breaker High” que se emitió entre 1997 y 1998. Inmediatamente, se trasladó hasta Nueva Zelanda, para encabezar el reparto de “Young Hercules”, serie en la que estuvo otros dos años. El siglo XX terminaba y con apenas 20 años, Gosling no prometía mucho.
A partir de aquí, se instaló en Los Angeles, consiguiendo su primera película en Hollywood nada menos que al lado de Denzel Washington, “Remember the Titans” (2000), de Boaz Yakin. Al año siguiente, vendría su primer papel protagonista en el cine con la polémica “The Believer”, de Henry Bean, ganadora del Gran Premio del Jurado de Sundance y por la que Ryan obtuvo la nominación al mejor actor en los Independent Spirit Awards, perdiendo en detrimento de Tom Wilkinson (“In the Bedroom”). Su nombre empezaba a hacerse un sitio.
A película por año, estrenó el thriller “Morder by Numbers” (2002), de Barbet Schroeder, junto a Sandra Bullock (con la que mantuvo un romance durante dos años), Ben Chaplin y Michael Pitt; la coral “The United States of Leland” (2003), de Matthew Ryan Hoge, donde coincidió por primera vez con Michelle Williams, y la romántica “The Notebook” (2004), de Nick Cassavetes, al lado de Rachel McAdams (con la que inició una relación que duró hasta 2007), Gena Rowlands y James Garner. El éxito de este film le colocó, según la revista People, en la lista de los 50 solteros más atractivos.
En 2005, el cineasta Marc Forster le reclutaba para su próximo proyecto después de la estupenda “Finding Neverland” (2004): “Stay”, desgraciadamente, fue infravalorada en su momento y pasó sin pena ni gloria por las carteleras de todo el mundo.
Con “Half Nelson” (2006), de Ryan Fleck, llegó su gran oportunidad. Su encarnación de Dan Dunne, un profesor de historia en un instituto de Brooklyn adicto a las drogas, llamó la atención en la meca del cine, logrando el premio al mejor actor en los Independent Spirit Awards y su primera nominación al Satellite, SAG, y, como no, al Oscar, convirtiéndose en el cuarto actor canadiense nominado en dicha categoría después de más de 60 años (los primeros fueron Walter Huston, 1936 y 1941, Raymond Massey, 1940, y Walter Pidgeon, en 1943). Al año siguiente, dos sugerentes estrenos le mantendrían en lo más alto: por un lado, “Fracture”, de Gregory Hoblit, un tour de force junto al mítico Anthony Hopkins. Por otro lado, la comedia “Lars and the Real Girl”, de Craig Gillespie, con la que ganaría el Satellite y obtendría su 1ª nominación al Globo de Oro, ambos en la categoría de Comedia/Musical, y su 2ª candidatura al SAG.
Después de dos años ausente en la gran pantalla, en los cuales fue fichado para más tarde ser reemplazado por Mark Wahlberg en “The Lovely Bones”, de Peter Jackson, según palabras del propio director debido a su corta edad, dedicándose a la música, formando la banda “Dead Man’s Bones” cuyo disco homónimo salió a la venta en 2009. El año pasado regresaba con la fantástica “Blue Valentine”, de Derek Cianfrance, su reencuentro con Michelle Williams, siete años después de “The United States of Leland”, por la que obtuvo su segunda nominación al Globo de Oro y la tercera al Satellite.
Este año regresa con la comedia “Crazy, Stupid, Love”, de Glenn Ficarra y John Requa, y, sobre todo, “Drive”, de Nicolas Winding Refn, y “The Ides of March”, del polifacético George Clooney, con las que aspira a ratificar su status.
Y ojo porque actualmente rueda al lado de Sean Penn, Anthony Mackie y Josh Brolin “Gangster Squad”, de Ruben Fleischer. Antes le veremos de nuevo a las órdenes de Derek Cianfrance en “The Place Beyond the Pines”, junto Rose Byrne, Bradley Cooper, Eva Mendes y Ray Liotta, y se unirá a Rooney Mara, Cate Blanchett y Christian Bale en “Lawless”, uno de los dos nuevos largometrajes anunciados de Terrence Malick.

5 comentarios:

Me encanta su actuación en Drive. Al igual que el film, que es muy notable.

Es de mis actores preferidos. GRANDE Gosling, pero la nominacion por DRIVE le quedaría muy grande.

Con un talento innegable, aquí tenemos a uno de los futuros grandes de el séptimo arte, Ryan Gosling, le deseo mucha suerte y una aún más fructífera carrera, pero este año no verá ni la nominación.

Ojala gane por su cuerpo... digo talento! jajaja

Tiene muchas posibilidades pero ojo Brad Pitt es seria competencia.

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